Caminar descalzo sobre brasas, no es un acto de locura ni un desafío físico sin más. Es un ritual de poder personal, una experiencia que transforma profundamente la relación con uno mismo. En este artículo te invito a mirar más allá del fuego, más allá del espectáculo: hacia el momento en que cruzar un lecho ardiente de brasas se convierte en cruzar la frontera del “no puedo” para siempre.  

He de reconocer que durante años viví el proceso del diagnóstico de esclerosis multiple como una carga imposible de sostener. San Juan de la Cruz habló de “la noche oscura del alma”, y eso fue exactamente lo que me sucedió en 2019. Tras más de 9 años diganosticada de EM toqué fondo. Un fondo tan profundo que apenas podía ver la luz. Y como siempre que se cierra una puerta se abre una ventana, entré a formar parte del Camino del Corazón, de mano de Luis Arribas, María Pinar Merino y cientos de almas generosas y bondadosas deseosas de cambiar este mundo. Desde ese momento, algo cambió en mí, y no volví a ser la misma (¡menos mal!).  

Científicos del Instituto HeartMath, de la Universidad de Standford en Estados Unidos, y del Instituto para el Desarrollo de la Conciencia, o de la Universidad de Waterloo en Canadá, y también la Universidad de Oxford en Inglaterra, y otras instituciones de prestigio, llevan desde 2003 publicando el resultado de algunas de sus investigaciones en neurocardiología. Recogemos aquí algunos de sus descubrimientos  

Paradigma antiguo: La salud dependía del médico y de las medicinas.
Nuevo Paradigma: La salud depende de cada individuo.  

Los árboles no solo son vitales para el equilibrio de los ecosistemas, sino que también aportan múltiples beneficios directos e indirectos a los seres humanos, desde la mejora de la salud física y mental hasta la mitigación del cambio climático. Proteger y plantar árboles es una inversión esencial para el presente y el futuro de nuestro planeta.  

La neuro-cardiología es un campo de estudio que explora la interrelación entre el sistema nervioso y el sistema cardiovascular, destacando cómo el corazón y el cerebro se comunican mutuamente y cómo esta comunicación afecta la salud general. Hoy se ha podido constatar que el “pequeño cerebro del corazón” envía más información al cerebro de la cabeza que viceversa.  

¿Qué pasaría si un día te dijeran que tienes una enfermedad grave o terminal, y que no hay nada que la medicina pueda hacer por ti? ¿Qué sentirías si, de repente, tu enfermedad desapareciera sin ninguna explicación médica? ¿Cómo reaccionarías si te enteraras de que eres uno de los pocos casos de curación espontánea en el mundo?  

La alquimia es una antigua práctica que combina elementos de la química, la metalurgia, la física, la medicina, la astrología, el misticismo y el arte.  

El Diccionario de la Real Academia Española define al placebo como una “sustancia que, careciendo por sí misma de acción terapéutica, produce algún efecto curativo en el enfermo si éste la recibe convencido de que esa sustancia posee realmente tal acción”.