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Gran parte del estrés que atraviesan las personas y el mundo durante estos tiempos turbulentos se debe a la carencia de cualidades del corazón, como la compasión, la bondad, la escucha sincera, la paciencia, el perdón y otras más.
Muchos de nosotros estamos de acuerdo en que estas cualidades del corazón son importantes, sin embargo, nuestra mente a menudo salta por delante de nuestro corazón y dicta nuestros comportamientos en momentos de decisiones importantes. Esto nos ha causado a muchos de nosotros estrés significativo, tiempo de inactividad y, a veces, problemas relacionados con la salud. Es importante saber que la investigación está demostrando que es la falta de conexión genuina con el corazón lo que subyace bajo una cantidad significativa del estrés que experimentamos tanto personalmente como dentro de los equipos y grupos.
La mayoría de nosotros hemos tenido momentos en los que nos sentimos heridos por ser tratados injustamente y luego pasamos gran parte del día molestos. Eso desencadena una serie de reacciones biológicas que se producen de forma automática y que tienen consecuencias graves. La presencia del cortisol en el torrente sanguíneo produce efectos nocivos en nuestro cuerpo a nivel físico, psicológico y emocional. Cada vez más personas se están dando cuenta de que podemos reducir estos niveles de estrés porque tenemos la opción de decir: "No, no esta vez". Podemos controlar y cambiar nuestras reacciones predecibles con algo de práctica, y poniendo nuestro corazón en ello.
El proyecto Iniciativa de Coherencia Global propone aumentar los atributos de nuestro corazón en muchos Focos de Atención. La razón es que gran parte de nuestro estrés se puede reemplazar con el equilibrio y los momentos más felices al permitir que la energía de nuestro corazón fluya a través de nuestras interacciones y respuestas diarias. La verdadera conexión a nivel del corazón crea orgánicamente un camino hacia una cooperación coherente y resultados más efectivos.
Practicar de manera consciente e intencionada las cualidades del corazón eleva nuestra vibración espiritual a un nivel de dignidad superior haciéndonos conectar con la esencia de quienes realmente somos. Esto aumenta nuestro sentido de seguridad personal, crea elecciones más claras y brinda un acceso más fácil a la guía intuitiva de nuestro corazón, a la vez que se favorece también la elevación de los demás.
En este momento del Cambio Planetario, es importante aumentar nuestras prácticas para actuar aumentando el cuidado, la amabilidad, la compasión y eliminando el juicio y la crítica. A medida que aumentamos nuestra atención mutua junto con la consideración objetiva de lo que realmente es mejor para la comunidad, atraeremos soluciones muy necesarias para el colectivo que le permitirán navegar a través de estos tiempos impredecibles. Sin embargo, este tipo de transformación tiene que comenzar con el individuo, es un trabajo interno que comienza con abrir nuestro corazón más para gestionar, desde ahí, lo que surja. Un cuidado más profundo es la nueva esperanza para nuestra humanidad.
Muchos de nosotros estamos de acuerdo en que estas cualidades del corazón son importantes, sin embargo, nuestra mente a menudo salta por delante de nuestro corazón y dicta nuestros comportamientos en momentos de decisiones importantes. Esto nos ha causado a muchos de nosotros estrés significativo, tiempo de inactividad y, a veces, problemas relacionados con la salud. Es importante saber que la investigación está demostrando que es la falta de conexión genuina con el corazón lo que subyace bajo una cantidad significativa del estrés que experimentamos tanto personalmente como dentro de los equipos y grupos.
La mayoría de nosotros hemos tenido momentos en los que nos sentimos heridos por ser tratados injustamente y luego pasamos gran parte del día molestos. Eso desencadena una serie de reacciones biológicas que se producen de forma automática y que tienen consecuencias graves. La presencia del cortisol en el torrente sanguíneo produce efectos nocivos en nuestro cuerpo a nivel físico, psicológico y emocional. Cada vez más personas se están dando cuenta de que podemos reducir estos niveles de estrés porque tenemos la opción de decir: "No, no esta vez". Podemos controlar y cambiar nuestras reacciones predecibles con algo de práctica, y poniendo nuestro corazón en ello.
El proyecto Iniciativa de Coherencia Global propone aumentar los atributos de nuestro corazón en muchos Focos de Atención. La razón es que gran parte de nuestro estrés se puede reemplazar con el equilibrio y los momentos más felices al permitir que la energía de nuestro corazón fluya a través de nuestras interacciones y respuestas diarias. La verdadera conexión a nivel del corazón crea orgánicamente un camino hacia una cooperación coherente y resultados más efectivos.
Practicar de manera consciente e intencionada las cualidades del corazón eleva nuestra vibración espiritual a un nivel de dignidad superior haciéndonos conectar con la esencia de quienes realmente somos. Esto aumenta nuestro sentido de seguridad personal, crea elecciones más claras y brinda un acceso más fácil a la guía intuitiva de nuestro corazón, a la vez que se favorece también la elevación de los demás.
En este momento del Cambio Planetario, es importante aumentar nuestras prácticas para actuar aumentando el cuidado, la amabilidad, la compasión y eliminando el juicio y la crítica. A medida que aumentamos nuestra atención mutua junto con la consideración objetiva de lo que realmente es mejor para la comunidad, atraeremos soluciones muy necesarias para el colectivo que le permitirán navegar a través de estos tiempos impredecibles. Sin embargo, este tipo de transformación tiene que comenzar con el individuo, es un trabajo interno que comienza con abrir nuestro corazón más para gestionar, desde ahí, lo que surja. Un cuidado más profundo es la nueva esperanza para nuestra humanidad.
ENFOQUE DEL CUIDADO - APLICANDO CUALIDADES DEL CORAZÓN
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- Comencemos por respirar profundamente varias veces para relajar nuestro cuerpo físico, aquietar nuestros pensamientos y sosegar nuestras emociones.
Comencemos a respirar desde el corazón, imaginando que es nuestro corazón el que toma el oxígeno del aire, se llena de él y lo suelta, liberándose de cualquier carga, pesar o resistencia. Generamos ahora un sentimiento de gratitud durante dos o tres minutos para activar los sentimientos de nuestro corazón.
- A continuación, hazte la siguiente pregunta: ¿qué cualidades del corazón podría practicar más para tener menos estrés para mí y para los demás? (Por ejemplo: amor, amabilidad, compasión, paciencia, conexión genuina, cooperación, gratitud, escucha más profunda sin juicios…).
Sugerencia: Escríbelas para recordar cómo aplicarlas.
- Ahora, pide a la guía inteligente de tu corazón que te indique situaciones en las que no has hecho una pausa para escuchar la evaluación de tu corazón antes de llevar a cabo alguna acción o reacción o de comunicarte con los demás.
(Hacer una pausa para elegir las cualidades del corazón durante las interacciones es una de las formas más efectivas de aumentar la coherencia social necesaria en estos tiempos de cambio. También es una de las cosas más beneficiosas que podemos hacer para ayudar a aumentar la coherencia global.)
- Para terminar, irradia desde tu corazón sentimientos de compasión y cuidado genuinos a las personas que conoces que están estresadas y sufren, y ve ampliando ese círculo hasta alcanzar a todo el planeta.
Puedes hacer el ejercicio en cualquier momento durante las 24 horas aproximadas que dura la luna llena. De esa manera te unirás a cientos de personas en cualquier lugar del mundo que se están sumando a esa misma iniciativa. Eso ayudará a elevar la tasa vibratoria del campo personal y colectivo.
CÓMO VENCER EL ESTRÉS
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Podemos prevenir mucho estrés haciendo una pausa antes de tomar decisiones, de elegir o de responder a las interacciones que surgen a lo largo del día en nuestra vida cotidiana. Cada vez más, las personas se están olvidando de hacer una pausa debido a la energía acelerada y al ritmo que la vida nos impone.
Un buen plan es proponerse hacer esas pausas a lo largo de 5 días, con una práctica consciente y observar los resultados. Somos conscientes de que la mayoría de nuestros errores provinieron de la falta de pausa y de no escuchar una evaluación más profunda, que puede venir de nuestro corazón.
Es fácil, pero nos proporcionará resultados notables. Simplemente cuando estemos en una de esas coyunturas, recordemos llevarnos la mano a nuestro corazón y preguntar: ¿Cómo gestionaría mi corazón esta situación? ¿Cómo resolvería mi corazón este problema? ¿Cómo respondería mi corazón ante esto?... Tras unos segundos se activará la estructura interna de ese corazón, se abrirá la intuición y se despertará la inspiración.
Un buen plan es proponerse hacer esas pausas a lo largo de 5 días, con una práctica consciente y observar los resultados. Somos conscientes de que la mayoría de nuestros errores provinieron de la falta de pausa y de no escuchar una evaluación más profunda, que puede venir de nuestro corazón.
Es fácil, pero nos proporcionará resultados notables. Simplemente cuando estemos en una de esas coyunturas, recordemos llevarnos la mano a nuestro corazón y preguntar: ¿Cómo gestionaría mi corazón esta situación? ¿Cómo resolvería mi corazón este problema? ¿Cómo respondería mi corazón ante esto?... Tras unos segundos se activará la estructura interna de ese corazón, se abrirá la intuición y se despertará la inspiración.
