Foto de Benjamin Child en Unsplash
La meditación ofrece múltiples beneficios comprobados científicamente. Un equipo de psiquiatras, liderado por el Hospital General de Massachusetts, realizaron un estudio que documenta cómo la práctica de la meditación afecta positivamente a nuestro cerebro. Según sus conclusiones, publicadas en Psychiatry Research, seguir un programa de meditación durante ocho semanas puede provocar considerables cambios positivos en las regiones cerebrales relacionadas con la memoria, la autoconciencia, la empatía y el estrés. Lo que hasta ahora pertenecía a un ámbito que podríamos llamar “más espiritual” nos transforma físicamente y puede mejorar nuestro bienestar y salud.
"Aunque la práctica de la meditación está asociada a una sensación de tranquilidad y relajación física, los médicos han afirmado que la meditación también proporciona beneficios cognitivos y psicológicos que persisten durante el día" explica la psiquiatra Sara Salazar, autora del estudio.
Meditar nos permite experimentar la serenidad y la concentración. Estas cualidades son esenciales para la construcción de una auténtica autoestima y para afianzar la confianza en uno mismo y en los demás.
Debido a nuestra adicción a la acción, no vemos el valor de sentarnos un rato en silencio contemplativo. La meditación bien practicada ofrece resultados que son observables relativamente pronto. Se puede meditar en grupo, con ojos abiertos o cerrados. Es bueno aprender a canalizar bien el pensamiento y así no necesitamos un mantra para hacerlo.
En definitiva, no hay excusas para no meditar. Nos frenan la adicción a la acción, la pereza y la falta de visión. Estamos acostumbrados a presionarnos, a actuar cada vez más rápido, a tener un apego excesivo a los resultados de nuestras acciones. Caemos con demasiada frecuencia en la trampa de las expectativas… todo ello nos crea la idea de que no tenemos tiempo. La disponibilidad de tiempo y cómo se usa es decisión de cada uno. Hay empresarios que meditan brevemente entre reunión y reunión, unos breves minutos, y esta sencilla práctica les ha cambiado la vida. Dejan de ser esclavos de las circunstancias.
Como dice Anthony de Mello, "Medita, contempla los muros, observa tus ideas, tus hábitos, tus apegos y tus miedos, sin emitir juicio ni condena de ningún tipo. Limítate a mirarlos y se derrumbarán. Gradualmente irás retirando tu atención de todas las distracciones. Dirige tu atención al interior del entrecejo. Observa tus pensamientos, no te dejes llevar por ellos, sólo obsérvalos. Crea pensamientos de paz y siente su presencia. Déjate inundar por la serenidad creando un silencio completo en tu mente”.
"Aunque la práctica de la meditación está asociada a una sensación de tranquilidad y relajación física, los médicos han afirmado que la meditación también proporciona beneficios cognitivos y psicológicos que persisten durante el día" explica la psiquiatra Sara Salazar, autora del estudio.
Meditar nos permite experimentar la serenidad y la concentración. Estas cualidades son esenciales para la construcción de una auténtica autoestima y para afianzar la confianza en uno mismo y en los demás.
Debido a nuestra adicción a la acción, no vemos el valor de sentarnos un rato en silencio contemplativo. La meditación bien practicada ofrece resultados que son observables relativamente pronto. Se puede meditar en grupo, con ojos abiertos o cerrados. Es bueno aprender a canalizar bien el pensamiento y así no necesitamos un mantra para hacerlo.
En definitiva, no hay excusas para no meditar. Nos frenan la adicción a la acción, la pereza y la falta de visión. Estamos acostumbrados a presionarnos, a actuar cada vez más rápido, a tener un apego excesivo a los resultados de nuestras acciones. Caemos con demasiada frecuencia en la trampa de las expectativas… todo ello nos crea la idea de que no tenemos tiempo. La disponibilidad de tiempo y cómo se usa es decisión de cada uno. Hay empresarios que meditan brevemente entre reunión y reunión, unos breves minutos, y esta sencilla práctica les ha cambiado la vida. Dejan de ser esclavos de las circunstancias.
Como dice Anthony de Mello, "Medita, contempla los muros, observa tus ideas, tus hábitos, tus apegos y tus miedos, sin emitir juicio ni condena de ningún tipo. Limítate a mirarlos y se derrumbarán. Gradualmente irás retirando tu atención de todas las distracciones. Dirige tu atención al interior del entrecejo. Observa tus pensamientos, no te dejes llevar por ellos, sólo obsérvalos. Crea pensamientos de paz y siente su presencia. Déjate inundar por la serenidad creando un silencio completo en tu mente”.
Beneficios para la salud mental, emocional, física y social
La meditación tiene muchos beneficios para la salud mental, emocional y física y también afecta a las relaciones, luego afecta a nuestra dimensión social.
Veamos los descubrimientos de la investigación en cada una de estas áreas.
Beneficios mentales: Reduce el estrés y la ansiedad: ayuda a calmar la mente y a disminuir pensamientos negativos y obsesivos. Mejora la concentración y la memoria: entrena la atención y la claridad mental. Aumenta la estabilidad emocional: favorece una mejor gestión de las emociones. Reduce síntomas de depresión: ayuda a eliminar el juicio, la crítica y las comparaciones.
Beneficios emocionales: Mayor bienestar y paz interior: ayuda a conectar con nuestras capacidades internas y nos prepara para manifestarlas. Aumenta la autoestima y la autocompasión: amplia nuestra percepción hacia nosotros mismos y hacia los demás. Mejora el manejo del enojo y la irritabilidad: nos ayuda a tener una mayor tolerancia. Promueve una actitud más positiva y consciente: nos enseña a buscar la parte positiva en lo que nos sucede en el día a día.
Beneficios físicos: Disminuye la presión arterial: favorece un ritmo de vida más lento y nos hace mantener la calma y la serenidad Mejora la calidad del sueño: El descanso es más profundo, favorece los periodos de ensoñación. Reduce tensiones musculares: al relajar los músculos, las articulaciones y los tendones se favorece un estado de bienestar. Fortalece el sistema inmunológico: Al eliminar el estrés se reduce la producción de cortisol el sistema inmune funciona mejor para responder a los retos de cada día. Tenemos un sistema de defensas más potente. Ayuda a controlar el dolor crónico: La relajación muscular, la activación energética y la serenidad emocional permiten afrontar el dolor crónico con una mejor capacidad de respuesta.
Beneficios en la vida diaria: Mejora las relaciones personales. Mejora la comunicación, nos sentimos más empáticos y aumenta nuestra paciencia. Aumenta la productividad y creatividad: Incluyendo pequeños momentos de meditación antes de realizar cualquier tarea observamos una mayor capacidad de gestión. Favorece hábitos más saludables: Ritmo de vida más pausado, relaciones interpersonales satisfactorias, desarrolla la capacidad de cuidado y atención a uno mismo.
Veamos los descubrimientos de la investigación en cada una de estas áreas.
Beneficios mentales: Reduce el estrés y la ansiedad: ayuda a calmar la mente y a disminuir pensamientos negativos y obsesivos. Mejora la concentración y la memoria: entrena la atención y la claridad mental. Aumenta la estabilidad emocional: favorece una mejor gestión de las emociones. Reduce síntomas de depresión: ayuda a eliminar el juicio, la crítica y las comparaciones.
Beneficios emocionales: Mayor bienestar y paz interior: ayuda a conectar con nuestras capacidades internas y nos prepara para manifestarlas. Aumenta la autoestima y la autocompasión: amplia nuestra percepción hacia nosotros mismos y hacia los demás. Mejora el manejo del enojo y la irritabilidad: nos ayuda a tener una mayor tolerancia. Promueve una actitud más positiva y consciente: nos enseña a buscar la parte positiva en lo que nos sucede en el día a día.
Beneficios físicos: Disminuye la presión arterial: favorece un ritmo de vida más lento y nos hace mantener la calma y la serenidad Mejora la calidad del sueño: El descanso es más profundo, favorece los periodos de ensoñación. Reduce tensiones musculares: al relajar los músculos, las articulaciones y los tendones se favorece un estado de bienestar. Fortalece el sistema inmunológico: Al eliminar el estrés se reduce la producción de cortisol el sistema inmune funciona mejor para responder a los retos de cada día. Tenemos un sistema de defensas más potente. Ayuda a controlar el dolor crónico: La relajación muscular, la activación energética y la serenidad emocional permiten afrontar el dolor crónico con una mejor capacidad de respuesta.
Beneficios en la vida diaria: Mejora las relaciones personales. Mejora la comunicación, nos sentimos más empáticos y aumenta nuestra paciencia. Aumenta la productividad y creatividad: Incluyendo pequeños momentos de meditación antes de realizar cualquier tarea observamos una mayor capacidad de gestión. Favorece hábitos más saludables: Ritmo de vida más pausado, relaciones interpersonales satisfactorias, desarrolla la capacidad de cuidado y atención a uno mismo.